Cinco de ellas fueron vistas por última vez en la Escuela de Infantería de San Bernardo y una en la Sexta Comisaría de Carabineros de dicha comuna.

Una querella criminal en contra de quienes resulten responsables de la desaparición forzada de seis víctimas, en las causas que se llevan adelante por los hechos ocurridos en cerro Chena entre septiembre y noviembre de 1973, fue la que se presentó de parte de la abogada jefa del Programa de Derechos Humanos; Paulina Zamorano, de la misma instancia, Daniela Romero y la abogada particular Alejandra Arriaza. La acción se llevó a cabo ante la presencia de familiares de las víctimas.

Se trata de Eduardo Campos y Enrique Montero (ambos de 29 años); Ignacio Santander (17); Vicente Blanco (37) y Manuel Silva (44), de quienes se pierde el rastro tras permanecer detenidos en los cuarteles de la Escuela de Infantería de San Bernardo -Cuartel N°1 en Balmaceda 500, comuna de San Bernardo y Cuartel N°2, al interior del cerro Chena-.

En el caso de la sexta víctima, Víctor Valdivia (18), se sabe que tras sobrevivir a los disparos realizados desde una patrulla militar -hecho en el que murieron tres civiles-, huyó herido al Hospital Parroquial de San Bernardo, donde fue aprehendido por carabineros y trasladado a la Sexta Comisaría de San Bernardo, lugar en el que fue visto por última vez.

Fundamentos

La querella se estructura en base a diferentes relatos que apuntan a que, a partir de septiembre de 1973, al interior del cerro Chena, se estableció un campo de prisioneros a cargo de la Escuela de Infantería de San Bernardo y que sirvió como lugar de detención, tortura, ejecución y desaparecimiento de distintas víctimas detenidas en la comuna del Maipo.

Entre los testimonios se encuentra la declaración de un soldado que, en octubre de 1973, cumplía labores de reservista en la escuela y una víctima que logró sobrevivir a la detención.

Ambos coinciden que en el lugar se realizaron traslados y movimientos de cuerpos para luego ser   inhumados. De hecho, uno de ellos indica que “de quedar algún tipo de cuerpo o restos de osamentas humanas, deben estar en ese lugar”.

 Testimonios: “Me encantaría encontrar algo de ellos para decir ‘aquí están’… porque nosotros no hemos encontrado nada”

“Soy Alicia Santander, esposa de Juan Cuadra y hermana de Ignacio (…). Me encantaría encontrar algo de ellos, para decir ‘aquí están’, porque nosotros no hemos encontrado nada. Mi mamá se murió esperando a su hijo. A ellos se los llevaron y es como que se los hubiera tragado la tierra. ¿Dónde los dejaron, dónde están? A ellos los sacaron de la casa, del trabajo y ahora… ¿dónde los dejaron, dónde están? Fueron los militares de Chena los que los fueron a buscar… y ahora, dónde están?”

“Soy Patricia Valdivia, ando en busca de mi hermano Víctor Eduardo, que desapareció en octubre de 1973. No lo hemos podido encontrar… Nosotros sabemos que ya no está vivo, pero seguimos buscando…”.

“Soy Ana María Santander, hermana de Ignacio. Son 50 años esperando encontrar algo de mi hermano y también de mi cuñado. Yo crecí viendo el sufrimiento de mi mamá. Yo era chica. La veía levantarse y acostarse llorando. Ahora que soy mamá, comprendo su dolor. Pienso que si a mi me pasara algo así con uno de mis hijos, no tendría su valor: ver que se llevan a tu hijo y no volver a saber nunca más de él… mi mamá se fue con ese dolor”.

Plan Nacional de Búsqueda

El 30 de agosto de 2023, con el lanzamiento del Plan Nacional de Búsqueda, el Estado se comprometió a agilizar los procesos de búsqueda de las personas víctimas de desaparición forzada a manos de agentes del Estado, en el período de la dictadura cívico militar -11 de septiembre de 1973 a 10 de marzo de 1990-.

Este plan apunta a una búsqueda integral, tal como lo señalan las normativas nacionales e internacionales, es decir, van desde el ámbito judicial como al social -acompañamiento y participación de las y los familiares de las víctimas- entre otras áreas.

Así es como, respecto al año 2022, las acciones de búsqueda del Programa de Derechos Humanos -órgano ejecutor del plan-, tuvieron un nuevo impulso, generando un alza de 58% del total y, al 31 de marzo de 2024, un incremento de 75%.

Por su parte, el acompañamiento y atención a familiares de personas víctimas de desaparición forzada también exhibe un alza. En el período que va del 30 de agosto de 2022 al 31 de marzo de 2023 -previo al lanzamiento del plan-, se realizaron 1.919 acciones, mientrasque, en el mismo período, pero posterior a la oficialización del plan, es decir, del 30 de agosto de 2023 al 31 de marzo de 2024, se han realizado 2.790 atenciones.